Estos gráficos representan el Parque Residencial de ALCALA DE HENARES, Madrid.
Son los Bienes Inmuebles, de uso VIVIENDA, matriculados a 1.1.2015, clasificados por tamaño y fecha de inscripción.
Cada barra horizontal representa una década, la inferior es la más reciente (2010-2014), y la superior la más antigua (<1930).
Cada color es un tamaño, del más cálido (<60 m2) al más frío (>180 m2).
La barra inferior (DELVI) representa el cálculo hecho desde Otropunto de la Demanda Latente de Vivienda (la demanda latente se configura por las personas que no tienen vivienda y que por su perfil sociológico (edad) y socioeconómico (no están en desempleo) son potenciales compradores). Es una estimación del número máximo de vivienda que constituye la demanda encubierta de una zona y se basa en las personas con el perfil de los actuales compradores de vivienda pero que todavía no han constituido un hogar.
Son datos fríos, sin cocinar.
Información para la toma de decisiones.
Información para el conocimiento.
Alcalá de Henares es un municipio de 87,72 km2 y una ciudad española perteneciente a la Comunidad de Madrid. Su término se extiende sobre la comarca natural de La Campiña aunque parte de este se extiende sobre La Alcarria. Culturalmente, pertenece a la Comarca de Alcalá de la que además es su capital.
La comarca alcalaína, situada en el centro geográfico de la Península Ibérica, ocupa uno de los enclaves más estratégicos, ya que es cruce natural de los caminos que atraviesan a lo largo y ancho la Meseta Central. La rica vega del Henares que discurre en dirección suroeste desde Guadalajara hasta su encuentro con el Jarama, con su abundancia en aguas y pastos, ha favorecido desde la Prehistoria el poblamiento humano. En el llano en épocas de tranquilidad, y en los elevados cerros en momentos de máxima belicosidad.
Alcalá está situada en un valle disimétrico en el que se distinguen geomorfológicamente dos zonas muy diferentes: el amplio valle cuaternario del río Henares y el glacis o pendiente de los cerros al sur del término municipal, que comunica con el páramo. El valle casi plano se extiende al norte del río formando terrazas mientras que el glacis con fuerte pendiente se sitúa en la margen izquierda del río.
El término municipal de Alcalá limita con los siguientes términos municipales: al norte con Meco y Camarma de Esteruelas, al sureste con Anchuelo, al sur con Villalbilla, al suroeste con San Fernando de Henares, y al oeste con Torrejón de Ardoz. Con Los Santos de la Humosa limita al este y al noreste, junto con una pequeña franja divisoria entre Alcalá y Azuqueca de Henares, en la ya provincia de Guadalajara
Fue declarada Ciudad patrimonio Mundial por la Unesco en 1998. Gracias al recinto histórico y el rectorado de la Universidad, es una de las nueve ciudades de España que la Unesco ha clasificado como únicas. Es famosa por su Universidad, construida gracias al cardenal Cisneros el 13.4.1499, pero tras languidecer durante el siglo XVIII, mediante la Real Orden de la Reina Regente de 29.10.1836, se decretó su supresión en Alcalá y traslado a Madrid, donde pasó a denominarse Universidad Central. Surgió con su estatus actual en 1977, al producirse el fenómeno de descentralización universitaria y constituirse como Universidad propia, lo que la convirtió en Ciudad Universitaria.
El lema o eslogan Ciudad del saber se está divulgando como identificativo de la ciudad. Las razones expuestas por el ayuntamiento para tal título son: se trata de una ciudad de tres culturas donde convive un espíritu de conocimiento en la Universidad. Hasta hace unos 20 años albergó la sede central del Instituto Cervantes; ahora el edificio del Colegio del Rey es la sede de honor de la asociación de la lengua española.
Alcalá está repartida en cinco distritos municipales, dirigidos por Juntas Municipales con el fin de descentralizar la administración local para acercar la gestión municipal a los vecinos.
Hasta que se incrementó la construcción de barrios residenciales, había 8 distritos municipales, que pasaron a ser 9. En 2007, para reducir gastos, se replantearon en 5 más sencillos, según el reglamento orgánico del ayuntamiento. Estos distritos se denominan Distrito I «Centro», Distrito II «Reyes Católicos», Distrito III «Chorillo/Garena», Distrito IV «Ensanche-Espartales» y Distrito V «El Val».
Distrito I «Centro» Comprende el casco histórico de la ciudad y barrios extramuros al mismo como los arrabales de Los Mártires, Santiago y las primeras barriadas surgidas en la época desarrollista a partir de los 40′. Este distrito es donde se encuentran la mayor parte de los órganos locales como el ayuntamiento, las concejalías y el pleno, así como las sedes de numerosas instituciones públicas. Es el distrito más pequeño, con 35 000 habitantes. Aquí se sitúa el segundo campus de la Universidad de Alcalá, con las facultades de Derecho, Economía, Documentación y Filosofía y Letras, además de 4 escuelas superiores, bibliotecas y archivos. El centro de Alcalá ha sido reformado desde que se declaró Patrimonio de la Humanidad, con un gasto medio de 16 millones de € en parcelas y monumentos. Al norte del distrito se encuentra la Estación de Alcalá de Henares y al este está la estación de autobuses. El casco histórico sufrió una salida de población que lo ha situado actualmente en unos 6.000 habitantes.
Distrito II «Reyes Católicos». Entre la línea ferroviaria Madrid-Zaragoza y la carretera M-300 comenzó a construir hacia 1950; comenzó por la construcción de las comunidades de Puerta de Madrid, seguido de Reyes Católicos, Ntra. Sra. de Belén y del Pilar. Ya hacia 1980 se iniciaron las labores de parcelamiento y construcción de los barrios de Nueva Alcalá, y la urbanización Villa de Alcalá. Tiene 62 000 habitantes. En 1965 se inició la construcción de la Rinconada. En este distrito se ubica la ciudad hispanorromana de Complutum y el arboreto de la Dehesa del Batán.
Distrito III «Chorrillo/Garena». Situado al noroeste y caracterizado por ser el menos poblado y más pequeño en cuanto a viviendas, con 35 000 habitantes, el distrito de Chorrillo-Garena posee el 70 % de los espacios industriales. Estos generan trabajo a más de 20.000 personas de la ciudad y de la Alcarria. Todos los polígonos se encuentran en torno a la A-2.
En los 60′ surgió el barrio del Chorrillo, más tarde, con el incremento de población procedente de lugares rurales, se construyó sobre el Cerro del Ángel. En décadas posteriores se crearon densos núcleos de población, como la urbanización IVIASA. Ya en el siglo XXI el incremento de la población obligó a hacer nuevas viviendas en la Garena, que cuenta con la Estación de La Garena, un centro de salud y un centro comercial del Corte Inglés.
Cuenta con edificios de interés arquitectónico e histórico como la antigua Universidad Laboral (hoy IES Antonio Machado y sede de la Dirección de Área Territorial de la Consejería de Educación), el Colegio San Ignacio de Loyola de la Compañía de Jesús que es un enorme complejo arquitectónico que data de la década de los 50′, el antiguo Convento de Gilitos con singulares construcciones como la alberca y el horno, el viejo complejo industrial de Forjas de Alcalá que constituyó una de las primeras y mayores industrias de la ciudad y el complejo universitario de la Escuela Universitaria Cardenal Cisneros de los Hermanos Maristas.
Distrito IV «Ensanche/Espartales». Localizada al norte, es la zona más reciente de la ciudad complutense. Las primeras edificaciones datan de finales de los 90′. Este ambicioso proyecto de crear 70.000 pisos y chalets entre la línea ferroviaria y la A-2 se desarrolló lentamente. Hoy sigue en plazo de construcción hacia el otro lado de la autovía del Nordeste por el barrio de Espartales. Pueblan el distrito 40.000 habitantes. El distrito posee el campus externo de la Universidad de Alcalá, con el resto de facultades y el Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Además del único centro de especialidades de Alcalá, el Centro Integral de Diagnóstico y Tratamiento Francisco Díaz, perteneciente al Servicio Madrileño de Salud (SERMAS).
Distrito V «El Val». Localizado al sur-este de la ciudad, construido desde comienzos de 1940 con el Grupo Lucas del Campo. Tiene 46.000 habitantes, dos centros de salud, 13 colegios entre públicos y privados, cinco institutos y una ciudad deportiva. En este distrito se asientan importantes centros comerciales de ocio y cines de Alcalá (La Dehesa, Cuadernillos, Alcalá Magna), centros deportivos (Estadio Municipal El Val, Pabellón Caja Madrid), la plaza de toros y las colonias de viviendas militares de la Marina, y la de Barberán y Collar. El Val está vertebrado por avenidas principales de Alcalá (Vía Complutense, Avenida Lope de Figueroa, Avenida de la Virgen del Val). Se caracteriza por estar limitado al sur por el río Henares y los cerros de Alcalá. En este distrito se encuentra la Ermita de la Virgen del Val (de antigua historia y tradición, aunque de fábrica neomudéjar) y el IES Complutense con sus más de 75 años de existencia. Perduran vestigios prehistóricos como los del yacimiento de la Esgaravita o de época visigoda y romana como los de la Villa del Val.
LOS ASENTAMIENTOS HUMANOS EN ALCALÁ DE HENARES EN LA PREHISTORIA
Durante la Edad del Bronce, como yacimientos, poblados ya en muchos casos, hemos de citar los de Ecce Homo, El Viso, Puente de los Santos y zona de Complutum. En torno al 800 aC aparece lo que podemos considerar los primeros elementos de la Edad del Hierro. Alrededor del siglo V aC se produce un gran cambio social y cultural con la entrada en escena de los pueblos que algo más tarde se enfrentarán a los conquistadores romanos; los celtíberos y en concreto para la comarca alcalaína el grupo de los carpetanos. El yacimiento del Hierro por excelencia en Alcalá de Henares es el Cerro del Viso que, por aquel entonces, ha cobrado mucha más importancia que el Ecce Homo, que va perdiendo población.
LOS ASENTAMIENTOS HUMANOS EN LA ÉPOCA ROMANA
El cerro del Viso es una enorme fortaleza natural de más de 200 m de desnivel con respecto al río Henares, que lo limita por su vertiente norte. La cima es una enorme llanura de más de 150 ha lo que la convierte en un lugar idóneo para el asentamiento humano y que el hombre ha aprovechado desde la Prehistoria.
En época Flavia, durante la segunda mitad del siglo I dC, y al igual que otras muchas ciudades romanas, Complutum cambia su sede y se traslada más cerca de la vía que, lógicamente, discurría por la zona sedimentaria y paralela al río Henares, uniendo las ciudades de Emérita Augusta con Caesaraugusta. A partir de este momento Complutum se va configurando como una gran ciudad, manteniendo a lo largo de sus 3 primeros siglos de existencia una enriquecedora vida municipal.
Los grandes edificios públicos de la ciudad se revisten con lujosos materiales, adornándose en muchos casos con abundante estatuaria facturada con finos mármoles importados de Italia; todo ello es reflejo de una economía que prospera debido a dos condicionantes de máxima importancia. Uno de ellos era el comercio derivado de la inmejorable situación geográfica de Complutum en la red viaria de Hispania.
El segundo, y no por ello menos importante, debió ser las actividades agropecuarias de vital significado en una economía como la romana, y que en el territorio complutense se potenció debido en gran medida a la fértil vega del Henares, con su abundancia en aguas freáticas y de superficie.
Las excavaciones sistemáticas que se vienen realizando durante los últimos años en la parte central de la ciudad de Complutum están permitiendo descubrir una serie de edificios públicos que nos ayudan a completar la precaria información que de la ciudad romana se tenía hasta ahora. La gran basílica de 32 m de longitud y tres naves; las importantes termas, la sofisticada red hidráulica, son algunas de las construcciones que nos informan de la gran infraestructura de servicios públicos que tenía la ciudad, que llegó a alcanzar una superficie de 40 ha.

Complutum s IV
Alrededor de la ciudad de Complutum se desarrolló una actividad agrícola importante, como lo evidencia la enorme cantidad de “villas” existentes en aproximadamente 20 Kms alrededor de la ciudad. Éstas se ubicaban siempre próximas a las vías de comunicación, generalmente en los terrenos sedimentarios más aptos para la agricultura extensiva.
A partir de este momento histórico que consolida la ciudad romana, veremos como los asentamientos van a producirse en localizaciones distintas, siempre hacia el levante. El burgo visigótico medieval a 1,5 km de distancia alrededor de la iglesia de S. Justo y la ciudadela defensiva árabe 2,5 km más allá sobre los cerros de la margen izquierda del río Henares.
LA OCUPACIÓN VISIGÓTICA
La presencia visigoda en la Península a partir del s. V consiste en el mantenimiento de guarniciones que aseguren los principales centros de poder y la comunicación entre estos y Aquitania. En este sentido, es importante el dominio de la vía Emérita Augusta-Caesaraugusta y su prolongación hacia el sudeste francés. Esto supondría el control de ciertas ciudades existentes en el camino, entre ellas Toletum. Otro centro de guarnición podría ser Complutum, en la que además confluyen otros dos caminos importantes. Sin embargo, es solo a partir de su derrota ante los francos en Voullé el 507 cuando se produce una penetración en masa de los visigodos en la Península Ibérica, a raíz de la cual se establecerá el Reino de Toledo.
Suponemos, en líneas generales, la existencia del Complutum de época visigoda en torno a la Iglesia de los Santos Niños Justo y Pastor que conmemoraría su martirio y enterramiento en aquel punto alejado 1,5 km de la ciudad romana en época del emperador Diocleciano.
ALCALÁ MEDIEVAL ISLÁMICA
La fecha de la presencia islámica en la comarca se referencia en el 825; Qal´at ‘Abd-al-Salam, como se la conocía entonces, quedaba englobada dentro de la frontera media de al-Andalus. El lugar elegido para el emplazamiento de la ciudad se cambiará a 2,5 km de la actual, y a 4 km de la antigua Complutum, lo que no significa que la destruyeran, ya que aún quedaba población cristiana (mozárabe) entre la cual aún perduraba la memoria de los Santos Niños, aunque el nombre y la población de ésta fueron cediendo en beneficio de la fortaleza de Alcalá.
Situaron la fortaleza en un lugar estratégico, en la orilla izquierda del río Henares, sobre una meseta de difícil acceso que ya había conocido construcciones de las épocas del Bronce y romana, y desde la cual se dominaba la Vía Toledo-Zaragoza y toda la Campiña. Tenía sobre todo un carácter militar y no era muy adecuada para el desarrollo de una población crecida, y no sólo por su pequeñez y difícil acceso, sino por la dificultad del abastecimiento de agua, por lo que al aumentar la población habría de situarse en los cerros vecinos, con cotas levemente inferiores, arrabales que quedaron sin fortificar, en los que transcurría la vida cotidiana.
Lo único que se puede ver hoy en día es una torre albarrana de construcción mudéjar del siglo XIV, así como otras 3 torres, aunque en muy mal estado de conservación, de las posible 9 originales; y un resto de lienzo de muralla del siglo IX de grandes sillares al exterior y sillarejo al interior.
ALCALÁ MEDIEVAL CRISTIANA. REPOBLACIÓN
En 1118 el arzobispo D. Bernardo sitiaría Alcalá, de la que huyen definitivamente sus moradores musulmanes, acontecimiento que reconocen los Anales Toledanos. El castillo siguió habitado, e incluso llegó a incrementar su población en un primer momento, pero la dificultad de vivir en él hizo que surgiese un burgo al lado de la Iglesia de San Justo, en el valle, el cual fue creciendo en detrimento del viejo núcleo urbano, al que le seguirán prestando atención los arzobispos de la mitra toledana hasta el siglo XV, funcionando durante su último siglo como fortaleza militar.
Este pequeño burgo de San Justo, formado por mozárabes unidos en torno a la memoria de los Santos Niños, comenzó a desarrollarse desde finales del siglo XI. Gracias a los privilegios que se concedían a aquellos que acudiesen a poblarlo sin tener en cuenta raza o religión (Fuero Viejo del Arzobispo Raimundo 1135), el Burgo se ha articulado según las distintas localizaciones de los judíos, moros y cristianos, los cuales se organizarán en microsociedades que se especializarán en diferentes actividades.

Casco medieval ALCALA DE HENARES
La población judía, cuya labor sería el comercio, se situó en lo que hoy es la Calle Mayor y sus alrededores, la cual responde a los patrones impuestos por sus organizadores; calle soportalada donde se instalaban las tiendas para las compras diarias, y que servirá como eje para el posterior desarrollo urbanístico. Como prueba de su actividad urbana, tenemos el dato de la concesión por parte de Alfonso VIII de la primera feria anual, de 10 días de duración después de la Pascua, que tendría lugar en el Coso, situado en las afueras, lugar donde además se celebraban las fiestas medievales. Coso que, tras la construcción de numerosos edificios en los siglos posteriores, se cerrará y llegará hasta nosotros convertido en la Plaza de Cervantes.
Su importancia será tal que esta actividad fue la principal en Alcalá hasta el siglo XV, en que son expulsados sus promotores. Su judería es la más numerosa después de la de Toledo. La morería se situó al norte de la judería, y separada por una calle ancha, próxima a las tierras cultivables, pues su actividad principal era la agricultura, propiciada por la riqueza de la tierra y por la abundancia de huertas de regadío, para la que crearán una red de abastecimiento de agua mediante minas o galerías subterráneas.
En el siglo XII (hacia 1164), como prueba de la presencia de los representantes de la Iglesia, se empieza a construir el palacio arzobispal, y tras las campañas devastadoras de las huestes almohades de Ya’qub al-Mansur, el prelado D. Rodrigo Jiménez de Rada, con la asistencia de Fernando III, durante los primeros años del siglo XIII, hizo que se protegiese su palacio y villa señorial construyendo una muralla. Por estas fechas se rehizo además la Iglesia de San Justo y se construyó la nueva casa arzobispal.
Durante el siglo XV la población seguirá desarrollándose, aun con la progresiva restricción de los derechos que empiezan a soportar los judíos. Alcalá seguirá gozando de creciente importancia, celebrándose en su Palacio Arzobispal sucesivas e importantes asambleas: en 1348 las Cortes, bajo Alfonso XI, promulgarán el famoso cuerpo jurídico del Ordenamiento de Alcalá, que derogó el Fuero juzgo visigodo y confiscó las Partidas de Alfonso X.
Será en la segunda mitad del s. XV cuando se amplíe la superficie del núcleo urbano, construyéndose extramuros el convento franciscano de San Diego (1449). Este crecimiento se hará a lo largo de los caminos que partían de la muralla, edificándose un nuevo caserío. Al norte del camino de Guadalajara se amplió la judería, y junto a ella iniciaron su caserío los musulmanes. Al sur del antiguo camino de El Val situaron los cristianos sus casas, como ya había pasado en los caminos que partían de las puertas de Santa Ana y del Vado. Donde no se edificó fue en torno al Palacio Arzobispal. El resto de los arrabales estaba constituido por huertas.
Después del asalto del rey de Navarra, el prelado Carrillo de Acuña fortificará sólidamente Alcalá, trazando las murallas de forma que se limitasen los avances del caserío, con el fin de estructurar ordenadamente el núcleo urbano. Murallas que mantendrán el lienzo norte y parte del oeste de la primera, de la que se conservan las Puertas de Madrid, de Burgos y el portillo de morería. Se trasladan las primeras puertas de Sta. Ana, del Vado y de Guadalajara, construyéndose las que llamaban Nueva, de los Aguadores, de San Julián y una supuesta entre las dos anteriores.
En el último cuarto de siglo, Alcalá se convertirá en una villa de tránsito y con frecuencia lugar de estancia de grandes personajes. Por ella pasarán la mayoría de los reyes castellanos y, fue aquí donde nacería Catalina, hija de los Reyes Católicos y futura esposa de Enrique VIII. Fue también en esta villa donde Isabel la Católica se entrevistó por primera vez con Cristóbal Colón, el 20.1.1486. Se configurará entonces la Plaza del Mercado, formada al levantarse edificios alrededor del antiguo Coso.
ALCALÁ DE CISNEROS
La época de esplendor comercial y económico que parece denominador común en los siglos XII, XIII, XIV y XV desaparecerá cuando en 1492 se haga público el Edicto de expulsión de los judíos. Al marchar los judíos de Alcalá desapareció la actividad mercantil, pero lo que sí quedó fue un organizado núcleo urbano que conservaba su estructura física, la cual será empleada por el arzobispo Cisneros para evitar su decadencia, viendo en ella el marco ideal para crear una institución cultural en Alcalá, en la que la nueva actividad sería la universitaria, y donde se formarán con sólidas doctrinas ortodoxas las futuras generaciones de la iglesia cristiana.
La Universidad fundada por Cisneros hace que surja una nueva ciudad, convirtiéndose en foco investigador de primera magnitud. Esta ciudad fue planificada y constituyó una especie de “ensanche” en época tan temprana, del casco medieval, comprendiendo los edificios docentes pero también los residenciales y de equipamientos de tal suerte que esta experiencia novedosa, la primera ciudad universitaria planificada en la historia, tuvo su influencia en la fundación de las primeras ciudades americanas como Santo Domingo y es la razón principal de la inclusión en 1998 de la Universidad y el Recinto Histórico de Alcalá en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. De esta primera implantación conservamos la reproducción del s. XVIII del plano de Ovando de 1564.

1564 Plano de la Ciudad Universitaria de Cisneros – Ovando
Los antecedentes se encuentran en la Escuela General instituida por Sancho IV en el 1293, seguida con la creación de 3 cátedras de Arte en el convento de Menores Franciscanos en 1495; cuando Cisneros coloca la primera piedra de la futura Universidad (marzo, 1500), Alcalá ya cuenta con imprenta.
Cisneros será el que convierta la villa en una ciudad de corte moderno, empedrando calles enteras, trazando la primera red de alcantarillado y diseñando las casas que han de ocupar los estudiantes, profesores y servicios complementarios; convirtiendo a Alcalá en modelo a tener en cuenta, donde se combinan el nivel intelectual con el urbanismo.
Durante su vida fundará 7 colegios menores y su labor continuará aún después de su muerte, edificándose hasta un total de 29 colegios según las normas establecidas en sus testamentos.
La extraordinaria vista de Alcalá de Anton Van den Wyngaerde en 1565 documenta detalladamente la ciudad que dejó Cisneros. Se observan claramente las diversas torres y puertas del recinto amurallado, el Palacio Arzobispal, la Iglesia Magistral, la Universidad y al fondo del paisaje el viejo recinto amurallado árabe sobre los cerros de la margen izquierda del río Henares. Esta ciudad quedará cuantitativamente congelada en el tiempo hasta el s XX.

1565 Imagen de ALCALA DE HENARES por Wyngaerde
En torno al mundo universitario funciona una vida con actividades muy variadas. Hay que mencionar las ferias libreras organizadas en la ciudad, así como la importante actividad editorial que se desarrolla desde finales del siglo XV. Aquí podemos mencionar la monumental Biblia Políglota Complutense, primera edición de los textos sagrados en 3 idiomas – griego, latín y hebreo – que constituye un esfuerzo editorial único en su época.
El auge de la ciudad que vió nacer a Miguel de Cervantes, se produce en el Siglo de Oro, cuyos más reconocidos representantes -Lope de Vega, Quevedo, Calderón, Tirso de Molina- son estudiantes en la ciudad así como muchos de los futuros administradores del Nuevo Mundo que se forman en su universidad.
El casco medieval mantiene un trazado extrañamente sencillo entre las tradicionales trazas orgánicas medievales al resultar muy marcado por ejes urbanos de dirección este-oeste como reflejo de su propia posición geográfica de cruce de caminos. En época barroca sufre tanto la inclusión de instituciones del tipo colegio-convento universitario, como la apertura de nuevas plazas con un sentido típicamente barroco que se puede sintetizar en la imagen de Pier María Baldi durante su viaje con el séquito de Cosme de Médicis en 1668. El perfil barroco de Alcalá coronado por los remates de las cúpulas, chapiteles, espadañas y agujas típicas de la arquitectura madrileña de los Austrias, constituye un ejemplo singular dentro de las ciudades históricas españolas.

1668 Imagen de ALCALA DE HENARES por Baldi.
Sin embargo, en esta época la crisis económica y la cerrazón intelectual comienzan a motivar un cierto declive en el número de personas que acuden a Alcalá para cursar estudios universitarios. En 1655 se produce la reforma de Medrano, que reduce el número de estudiantes y de cátedras. Con esto se produce el inicio de un lento declive que se prolongará a lo largo de todo el siglo XVIII, para culminar con la definitiva marcha de la Universidad a mediados del siglo XIX.

Casco Renacentista ALCAL DE HENARES
LA CIUDAD DE LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA A LA EXPANSIÓN INDUSTRIAL
El poblamiento de Alcalá no conoce a lo largo del siglo XIX ningún cambio esencial. La primera mitad de la centuria es nefasta, pues aún pesa sobre la ciudad la reciente expulsión de los Jesuitas. A esto se añade el traslado de la Universidad Complutense a Madrid (1836), hecho que acaba de rematar el declinar que Alcalá sufriría desde el siglo XVII. La centuria se había iniciado con la ocupación de la ciudad por las tropas napoleónicas que llegaron a una población semidesierta y que utilizaron como acuartelamiento mientras Madrid permaneció en su poder.
La estructura del poblamiento no se ve alterada, ya que la Desamortización y la marcha de la Universidad sólo provocan un cambio en la propiedad, no en la organización del espacio. Las tierras que antes eran de la Iglesia y los edificios abandonados por los estudiantes, pasan ahora a manos de las familias aburguesadas o del Ejército, que dispone de gran número de los edificios abandonados.
La ciudad ha perdido su función y espíritu principales; la Universidad y ha visto utilizados sus antiguas edificaciones por instituciones militares y penitenciarias, constituyendo una especie de guarnición de la capital. El plano del Instituto Geográfico y Catastral de hacia 1870 documenta detalladamente los edificios institucionales con enorme peso en el conjunto parcelario, así como la menor proporción de la edificación residencial. La mayor transformación surgirá tras la demolición del antiguo Convento de San Diego junto al Colegio Mayor Universitario y su sustitución por los enormes cuarteles del Príncipe y de Lepanto que ocuparán gran parte del borde oriental del ensanche universitario cisneriano.
La ciudad universitaria abierta y bulliciosa se convertirá así en una ciudad introvertida y censurada por la presencia de las grandes implantaciones militares, conventuales y penitenciarias en su interior.

1870 ALCALA DE HENARES – IGN
Sólo queda por considerar la llegada del ferrocarril a la zona alcalaína. Alcalá ha quedado al margen, como casi toda la Meseta, del desarrollo industrial que se inicia en la segunda mitad del siglo XIX. Sin embargo, se ve afectado por la construcción del ferrocarril Madrid-Zaragoza, que se inicia en 1856. A lo largo de los caminos que unen el núcleo urbano con la vía férrea y la estación, surgen edificaciones como el Hotel Laredo que, sin embargo, no alteran en esencia el poblamiento.

1875 ALCALA DE HENARES – IGN
EL DESARROLLO INDUSTRIAL Y LA EXPLOSIÓN DEMOGRÁFICA
Alcalá de Henares conoce una importante alteración en la distribución de su poblamiento a partir de 1950. Se trata básicamente de la ocupación de muchas zonas de explotación agraria, que pasan a ser áreas industriales. Esto conlleva una gran expansión demográfica que provoca la extensión del casco urbano en varias direcciones, pero fundamentalmente a lo largo de la línea que marca la carretera Nacional II Madrid-Barcelona. Nos encontramos aquí ante la primera variación importante que sufre el casco urbano en Alcalá después de Cisneros, cuantitativamente hablando.

1920 ALCALA DE HENARES – IGN
El desarrollo industrial en Alcalá se entiende dentro del marco del desarrollo del Corredor Madrid- Guadalajara. Todo ello es un reflejo de la vocación industrial del propio Madrid, que en cierto momento busca una descongestión en el área periférica y en sus mismas vías de acceso. En efecto, se trata de un emplazamiento cercano a Madrid. Las comunicaciones son buenas, contando con ferrocarril y CN-II. La inversión en solares es interesante frente a los precios de Madrid. Dispone de mano de obra. La zona es rica en aguas subálveas y superficiales.

1950 ALCALA DE HENARES – IGN
Como consecuencia de todo esto se produce un gran crecimiento de la población a partir de los años 1950-1960, crecimiento que se incluye dentro del comportamiento general de la Campiña del Bajo Henares. Alcalá había conocido una cierta inmigración desde principios del siglo, motivada en gran medida por la vida que la ciudad recibe por medio de sus numerosos acuertelamientos de tropas.
Ahora, la inmigración se dispara y la población se multiplica, pasándose de 18.419 habitantes en 1940 a 74.697 en 1970. Naturalmente, la nueva población se relaciona básicamente con actividades encuadradas en el sector secundario, siendo además una población muy joven. El rejuvenecimiento de la población se acentúa si tenemos también en cuenta que la afluencia de matrimonios jóvenes hará también crecer el número de nacimientos.
El problema que se plantea es obvio: en 30 años, la población de Alcalá de Henares se multiplica por 6, y la ciudad no cuenta con un Plan General de Ordenación Urbana. El crecimiento se realiza de un modo desordenado, sin atender a normas urbanísticas ni a consideraciones de ningún tipo. Priman ante todo las necesidades de la industria, que se apropia de terrenos que antes se dedicaban a la agricultura. También, será preciso alojar a los nuevos trabajadores de Alcalá, cosa que motiva la construcción de numerosas viviendas y la expansión del casco urbano, de una forma desprogramada y por tanto desordenada.
La expansión se ha realizado en aureola en torno al casco antiguo, aunque son las principales vías de comunicación las que marcan la dirección del crecimiento, en especial la carretera Nacional II Madrid- Barcelona, que ahora recorre la ciudad a lo largo de una distancia de 5 Km; 10 Km si incluimos las industrias. La expansión también se produjo a lo largo de las carreteras de Ajalvir, Daganzo y Camarma al norte y el Camino del Val al este.
Se perdieron para la agricultura los terrenos del Val, los Juncales, el Chorrillo y la Rinconada. Esta pérdida es mayor en cuanto a que en los dos primeros se encontraban además dos importantes yacimientos arqueológicos de época romana (uno de ellos la ciudad de Complutum, hoy en día parcialmente sepultado bajo la urbanización Reyes Católicos). Por otra parte, el crecimiento desordenado motivó que Alcalá de Henares entrase en la década de los 70 con una población cercana a las 100.000 personas, sin que existiese ningún plan urbanístico ni un sector servicios lo bastante desarrollado. Se crean sólo viviendas y espacios industriales que no se acompañan de áreas culturales, deportivas o simplemente de espacios de descongestión. Las nuevas zonas se asemejan más a ciudades dormitorios que a una prolongación de la auténtica ciudad.
LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX
Desde los comienzos del s. XX hasta la Guerra Civil de 1936, Alcalá vive un periodo de tranquilidad. El advenimiento de la Segunda República en abril de 1931 alteró, al igual que en todo el país, la vida ciudadana, llegándose a declarar en la ciudad el estado de guerra con motivo de la huelga general de 1934.
En 1936 se producen saqueos e incendios de iglesias y conventos. Las unidades militares de Alcalá se suman a la sublevación del 18 de julio que dio origen a la Guerra Civil pero, una vez establecido en Madrid el mando republicano, se envió una columna que hizo frente al ejército sublevado que se había hecho fuerte en la Magistral, que resultó finalmente incendiada y con su cubierta desplomada. Muchos otros edificios sufrieron grandes deterioros durante la contienda; entre ellos la Capilla de San Ildefonso, el patio Trilingüe o el patio de Sto. Tomás de Villanueva, todos ellos en el conjunto central del Colegio Mayor de San Ildefonso corazón de la antigua Universidad. Alcalá salió de la guerra destrozada tanto en lo social como en lo material por las pérdidas humanas y el enorme deterioro de su patrimonio.
El palacio arzobispal que había sido restaurado y rehabilitado el siglo anterior para instalar en él el Archivo Central y que en 1936 albergó dependencias militares y depósito de municiones, inexplicablemente, fue pasto de las llamas tras el final de la Guerra Civil en agosto de 1939.
El edificio arruinado fue finalmente demolido poco después, perdiéndose el magnífico patio de Fonseca y la escalera de Berruguete, obra de Alonso de Covarrubias y uno de los grandes ejemplos, al igual que la fachada de la Universidad, del renacimiento español.
A lo largo de la postguerra se producen numerosas intervenciones de restauración sobre aquel patrimonio tan dañado por la guerra en los antiguos edificios de la Universidad, de la iglesia Magistral, de las Murallas y de los diversos conventos. Al mismo tiempo se producen desarrollos derivados de la intervención del departamento de Regiones Devastadas, como puedan ser los barrios de viviendas unifamiliares de raíz vernácula de José del Campo y de Ferraz.

1943 Proyecto de Ensanche y Urbanización. José de Azpiroz
La primera planificación del s. XX se aprueba por el Ayuntamiento en 1943 y es un proyecto de Ensanche y Urbanización redactado en 1943 por el arquitecto José de Azpiroz que había sido uno de los arquitectos del racionalismo madrileño vinculado al GATEPAC y que tras la guerra civil dejaría diversas obras de calidad en Alcalá y en Madrid. Estas obras seguirían, como las de otros profesionales en la postguerra, las líneas historicistas que imponía la nueva situación de aislamiento y autarquía en el país.
En el plano de Ordenación Actual se muestra como la ciudad, a consecuencia del tendido del ferrocarril, está creciendo en su sector norte hacia la estación. El otro barrio histórico extramuros era el llamado del Arrabal, al este, apoyado en la Avenida de Guadalajara. El proyecto trata de valorar el patrimonio arquitectónico y urbano del casco histórico estableciendo una contención en la construcción sobre los solares existentes con una ordenanza muy estricta, así como algunas aperturas viales limitadas a la recuperación de trazados históricos o al saneamiento y aprovechamiento de grandes manzanas.
El crecimiento de la ciudad que vendría a duplicar su superficie, se configura en base a los ejes fundamentales de origen medieval y de la ampliación cisneriana de las calles Mayor y Colegios, configurando un conjunto que crece fundamentalmente al levante con un esquema radiocéntrico.
Se proyecta una ronda final de borde a partir de la cual se prohíbe la edificación. En el ensanche se distinguen cuatro zonas para usos residenciales y dos para usos industriales con proximidad a las vías del ferrocarril en un esquema que prima la conservación del centro histórico y que organiza intensidades crecientes y usos diversificados según aumente la distancia al mismo.
EL CRECIMIENTO DE LOS AÑOS 60 Y 70
Al comenzar el s. XX Alcalá contaba con algo más de 11.000 habitantes con una tendencia ascendente que alcanza en 1950 los 15.000 habitantes. El crecimiento de la población en los 60′ fue explosivo y desordenado, fomentado por la implantación de nuevas industrias sobre terrenos con buenas comunicaciones en el Corredor Madrid–Guadalajara, a las que llegarían los trabajadores de zonas rurales en un proceso de inmigración característico de aquellos años hacia los polos del desarrollo que se producen en el centro y norte del país. Alcalá parte de los 25.000 habitantes en 1960 y llega hasta los 130.000 al finalizar la década de los años 70.
La fábrica de Forjas de Alcalá, hoy desaparecida, que estaba dedicada a reparar el material móvil ferroviario, se había inaugurado a finales de los años 20′ y se situaba frente a la estación al norte de la vía férrea, constituyendo el inicio del proceso de industrialización de la ciudad.
A partir de los 60′ la industria pasa a ser la actividad predominante del municipio junto a los servicios mientras disminuía el sector primario para ir progresivamente desapareciendo. Las primeras industrias en localizarse, siempre entre la vía del ferrocarril y la carretera nacional, fueron Metalúrgica Madrileña en 1956, Gal en 1960 y Roca en 1962, (éstas dos últimas junto al recinto histórico al que condicionarán en su crecimiento para las futuras décadas), así como las fábricas de línea blanca de Ibelsa y Cointra en 1964 en áreas más alejadas y por tanto menos comprometidas para el desarrollo urbano.
La industria en Alcalá ocupa grandes parcelas, del orden de 2 Ha por empresa y asimismo un número de trabajadores que cuadriplica la media madrileña. Por tanto se trata de una estructura de implantación grande con notable consumo de suelo.
La ocupación residencial para los nuevos habitantes de la ciudad se produce sin planificación alguna, apoyándose en la prolongación todavía rural de las vías preexistentes, sin tener en cuenta la racional ordenación del viario y de la división de manzanas del Plan de Azpiroz de 1943. Hasta los 80′ se desarrollan densos barrios de edificación abierta en altura alrededor del casco histórico prolongando el ensanche al este entre las calles Juan de Austria y Lope de Figueroa, al sur en el espacio disponible entre instituciones militares y penitenciarias y al oeste sobre el eje de la Av. Reyes Católicos hasta ocupar un 50% de la antigua ciudad romana de Complutum. El desarrollo residencial salta también la vía férrea apoyándose en las carreteras de Daganzo, Camarma y Meco.
En este caótico panorama, que además carece de las infraestructuras necesarias de saneamiento y abastecimiento, destaca una primera actuación ortodoxa que impulsa el Instituto Nacional de la Vivienda y que constituye el Plan Parcial Puerta de Madrid de 1973, un desarrollo urbano lineal que parte hacia poniente desde el centro histórico y que vino a constituir un respiro en el panorama circundante por su buena disposición urbana y arquitectónica, con amplias vías de acceso y dotado de zonas verdes y equipamientos que separan las unidades residenciales del entonces intenso tráfico de la Carretera Nacional II.

1973 – PP Puerta de Madrid. Alcalá de Henares

1980 Barrio del Val. Alcalá de Henares
Por otra parte desde la promoción privada se desarrolla el planeamiento del barrio de El Val desde 1977 al final de la década, lo que estructura todo el área residencial al este hasta el río Henares.
La ordenación parte de la estructura urbana existente con una ordenación reticular de edificación abierta, disminuyendo su densidad hasta las tipologías unifamiliares junto al río, ordenando áreas de equipamiento y zonas verdes tanto interiores como en los bordes de ribera.
El desarrollo urbano había funcionado hasta entonces con unas meras ordenanzas aprobadas en 1960 que olvidando cualquier respeto por el patrimonio histórico imponen ampliaciones viales y tipologías inadecuadas en el casco histórico, afortunadamente con consecuencias muy localizadas en el mismo.
Por el Decreto 1284 de 1968 se declara el Conjunto Histórico de la ciudad de Alcalá de Henares con una delimitación que coincide, salvo algunas áreas de borde, con el actual recinto, así como con una zona de respeto o de protección de carácter cautelar. El Conjunto Histórico de Alcalá quedará así vinculado a la legislación nacional de protección del patrimonio y contará desde entonces con una Comisión Local encargada de supervisar los proyectos de construcción o rehabilitación en el recinto declarado, bajo una normativa específica.
Al final de la década, en 1978, se crea de nuevo la Universidad de Alcalá para cuya implantación se aprovechan los terrenos del aeródromo militar en desuso existentes en la gran superficie que secomprende entre las carreteras de Meco y la Nacional II. En un principio esta universidad se crea únicamente para aliviar la progresiva congestión de las universidades madrileñas (Complutense, Politécnica y Autónoma).
El proceso del planeamiento general en aquella década fue muy dificultoso ya que en 1971 COPLACO redacta el Estudio del Corredor Madrid–Guadalajara, a modo de esquema director regional y en 1972 lo desarrolla con la redacción del Plan General de la Comarca Alcalá–Meco–Camarma. A partir deello se aprueban las Normas Complementarias y Subsidiarias (NNCS) de Alcalá en 1975, modificadasen 1976. Por sentencia de la Audiencia Nacional de noviembre de 1978 se deja sin efecto la orden de aprobación de las NNCS devolviéndolas a COPLACO para su adaptación a la Ley del Suelo de 1976.
Después de la promulgación de la Constitución Española de 1978, que puede considerarse la fechade cierre de la Transición Española, se celebran las primeras elecciones municipales democráticasen 1979. La labor del nuevo consistorio se centrará inicialmente en dotar de infraestructuras generales de saneamiento y abastecimiento a la ciudad, adecuadas al desarrollo ya existente y alprevisto, así como atemperar los desarrollos urbanísticos muy densos, en edificación abierta, que estaban en marcha en especial en la parte sur del casco histórico. Esto fue posible a la vista de la crisis económica que ya se venía produciendo desde 1975 y que hizo perder un tercio del empleo industrial anterior y que hacía también inviables las previsiones edificatorias de las promociones en marcha. Se procuró al mismo tiempo la captación de nuevas zonas libres y equipamientos.

NNSS-1984 Alcalá de Henares
Las NNSS de 1984 redactadas por Carlos Ferrán y la Comunidad de Madrid constituyen el primer planeamiento general de la ciudad que tuvo como objetivos generales la preservación del patrimonio y del medio rural, la creación de zonas verdes y equipamientos y completar la estructura urbanade zonas periféricas dispersas. Al mismo tiempo se proyectaba la creación de un eje mixto terciario-residencial para el desarrollo urbano al norte de la estación que separase las áreas industriales al oeste, de las terciarias de la Universidad al este, limitar la edificabilidad de zonas densificadas proveyéndolas de zonas libres, así como integrar en la estructura general la variante de la CN–II y otras redes viarias previstas para el futuro.
Durante los 7 años de vigencia de las NNSS de 1984 se realizó una laboriosa gestión particularizada en las redes generales de espacios libres, sustituyendo el sistema reglado del planeamiento general para su captación por medio del mecanismo del aprovechamiento medio, por la suscripción de convenios específicos para compensar aquellas redes con solares previamente negociados en los nuevos desarrollos. Así se obtuvieron más de 10 Ha de espacios libres en el sur de la ciudad para equipar las áreas más densas y preservar toda la parte más occidental de la ciudad romana, incluidos sus foros.
En 1985 se suscribe el Convenio Interdepartamental para la recuperación de la Universidad en el Casco Histórico, promovido por el Ayuntamiento y la Universidad que concitan la intervención de 4 ministerios de la Administración Central, la Comunidad de Madrid y la Diputación de Guadalajara.
El objetivo del Convenio era, en esencia, recuperar grandes edificios militares y penitenciarios ya obsoletos para aquellas instituciones y así volver a instalar usos universitarios y culturales en los antiguos colegios, de manera que el centro histórico pudiera recobrar su espíritu y función y servir así para la recualificación del conjunto, de sus espacios públicos y del uso residencial.
La firma del Convenio de 1985 que venía precedida de varias intervenciones de rehabilitación iniciadas por el Ayuntamiento para reequipar el casco histórico (Capilla del Oidor, Centro de Día en la c/ Damas, Colegio del Rey, Colegio Cardenal Cisneros) supuso grandes inversiones para la rehabilitación de los antiguos cuarteles y cárceles para usos universitarios y equipamientos culturales y tuvo trascendencia europea al obtener las actuaciones los premios del Consejo de Europa y de Europa Nostra.

PGOU 1991 – Alcalá de Henares.
El Plan General, redactado por la Compañía Planificadora, que se aprueba en 1991 y que se comenzóa redactar en 1988, 4 años tras la aprobación de las Normas, con el fin de superarlas considerables carencias en la gestión y la ordenación de éstas, planteó unas líneas estratégicas fundamentales para el desarrollo y reequipamiento de la ciudad. Estas fueron primeramente la conclusión del desarrollo residencial en el ensanche norte que habían previsto las NNSS-84, una vez iniciada la recuperación económica, estructurando vías colectoras de ronda que permitieran las conexiones principales de la ciudad, el establecimiento de la red viaria general en el conjunto,y la calificación de grandes superficies de espacios libres y de ocio. Al mismo tiempo se mantenía la determinación del crecimiento residencial según el eje norte ya prefigurado por las NNSS-84 separándose por el sistema general del Camarmilla de áreas industriales, y se proyectó la diversificaciónde la oferta industrial con la creación del parque tecnológico de La Garena y el área I + D de la Universidad, así como la creación de áreas terciarias y de equipo institucional en relación con los grandes equipamientos y el transporte.
Las proyecciones de población para el año 2001 se situaron entre los 167.000 y 184.000 habitantes (la población real para entonces sería de 173.000 habitantes) para lo que se preparó suelo residencial en cuantía de unas 18.000 viviendas; 8.000 en suelo vacante y 10.000 de nueva creación, así como la necesidad de procurar suelo para 12.500 empleos en la industria, del que ya existía una capacidad residual de 8.000 empleos en el suelo pendiente de desarrollar de las NNSS –84, lo que vendría a corresponder a cerca de 300 Ha de nuevo suelo para este fin.
La superficie total del suelo urbanizable programado clasificado fue de 1.200 Ha de las cuales la mitad se encontraban ya con planes parciales en tramitación, a lo que se añadirían 400 Ha en suelo no programado.
La superficie total de sistemas generales clasificados (zonas verdes y viario principalmente) fue de cerca de 400 Ha de las cuales se encontraban captadas únicamente un 20% en el momento de la aprobación del Plan.
El desarrollo de los Planes Parciales programados por el Plan General tuvo un antecedente institucionalen el Plan Parcial del Campus Universitario de 1990, redactado por la Oficina Técnica de la Universidad, siendo de destacar asimismo el Plan Parcial de la Garena de 1996, redactado porla sociedad ARPEGIO de la Comunidad de Madrid para usos industriales, modificado en 2000 para incluir usos residenciales y el Plan Parcial de Espartales Sur de 1993 también de iniciativa pública de la Comunidad de Madrid que se desarrolló al norte de la Autovía A-2 para uso residencial. Al hilo de la redacción del Plan General ya se había comenzado a preparar la redacción del Plan Especial de Protección del Casco Histórico que se veía muy necesario para no desvincularse del planeamiento global y para adaptar la insuficiente normativa que se contenía en las NNSS de 1984.
El Plan General de Alcalá de 1991 definió el sector de la Garena, a la entrada de Alcalá, entre la base de Torrejón y el ferrocarril, como un “área de oportunidad estratégica” de 338 ha, con una edificabilidad bruta de 0,21 m2/m2 de usos mixtos: el terciario (comercial, hotelero y oficinas), y 450 viviendas en torno a un campo de golf debían localizarse en el subsector norte, lindando con polígonos industriales. Mientras que el uso industrial y tecnológico se disponía en el sur, junto al casco urbano. El plan parcial aprobado en 1993 habilitó 600 viviendas más en el subsector sur, tras una modificación del plan general que ajustó el sistema general viario.
Sin embargo, el sector no llegó a urbanizarse: la industria tecnológica competía con el Parque Científico de la Universidad de Alcalá, y las oficinas y villas en torno a un campo de golf mostraban una dudosa viabilidad. En 1996 se revisó el convenio expropiatorio, aprobándose la modificación del plan general y del plan parcial en 1997, de acuerdo a la reordenación propuesta por Arpegio:
– Traslado al norte de la industria general, junto a los polígonos del entorno, reservando el centro para la industria innovadora, contando todo el subsector con 383.420 m2 industriales, y una edificabilidad próxima a 0,2 m2/m2.
– Creación de un barrio urbano, de casi 90 hectáreas, en Garena-Sur, con 2.189 viviendas (1.386 colectivas y 803 unifamiliares), próximo al casco urbano y en relación con el de Camarmilla, ubicándose el centro comercial previsto en las proximidades de la estación. El subsector residencial disponía de 323.274 m2 edificables (el 30% de uso terciario), y una edificabilidad superior a 0,3 m2/m2. La densidad, excluida la pieza comercial, alcanza las 30 viviendas/ha, con un alto porcentaje de vivienda unifamiliar (más del 36%). El nuevo tejido residencial, más denso y cercano al casco, justificó la estación de Cercanías que construye Arpegio. Junto a ella se ubica El Corte Inglés, con casi 45.000 m2 edificables. Tras la reordenación, en sólo 6 años, la actuación y el barrio están casi consolidados.
El Plan Especial de Protección del Casco Histórico redactado en su última versión por Carlos Ferrán y Cristóbal Vallhonrat se aprueba en 1998 y contiene determinaciones fundamentales para la preservación del patrimonio histórico como pueden ser, respecto de la protección, un catálogo de bienes protegidos en diversos niveles comprendiendo 70 edificaciones institucionales y mas de 400 residenciales, así como un inventario de edificaciones discordantes y conflictivas, la determinación de los usos admisibles en la edificación atendiendo a su tipología histórica y la asignación de aprovechamientos de forma coherente con los de la edificación histórica, reduciendo los de la antigua normativa.

1998 Plan Especial de Protección del Casco Histórico. Alcalá de Henares
Desde el punto de vista de la trama urbana el Plan Especial establece zonas de reforma de alineaciones para la recuperación de espacios públicos y pasajes históricos y en el ámbito de la regulación se plantea la normativa de rehabilitación y de la nueva edificación, así como un posible desarrollo de las grandes parcelas institucionales mediante planes específicos que actúan como estudios previos de impacto acerca de las actuaciones de rehabilitación y nueva planta que se puedan proyectar.
El Plan de Protección tuvo la virtud de venir acompañado por la inclusión de la Universidad y el Recinto Histórico de Alcalá de Henares en la Lista del Patrimonio Mundial de UNESCO en diciembre de 1998, cuyo expediente se venía redactando desde el año 1996 como parte de un convenio específico suscrito entre el Ayuntamiento, la Universidad y la Comunidad de Madrid.
El expediente que fue destacado como ejemplar por los supervisores internacionales de ICOMOS sirvió para aglutinar las diversas iniciativas de recuperación física, así como de las investigaciones históricas sobre una ciudad olvidada y casi congelada en el tiempo por la pérdida de su función histórica y su ocupación por instituciones militares y penitenciarias.
La sistematización de la información histórica, física, urbanística y documental sobre el patrimonio alcalaíno sirvió, a modo de planificación y programación, para desarrollar nuevas ideas de mejora y gestión del recinto histórico. Alcalá es finalmente incluida en la Lista del Patrimonio Mundial como la primera ciudad universitaria planificada en la historia que fue un modelo para Europa y América, como expresión de la “Civitas Dei” y por su contribución al desarrollo intelectual de la humanidad en la materialización de aquella ciudad y en los avances lingü.sticos que tuvieron lugar por la definición del idioma español y por las obras de Miguel de Cervantes.

1993 Plan Parcial Espartales Sur. Alcalá de Henares
El desarrollo urbano en la primera década del s. XXI mantiene un curso acelerado que permite ir edificando los extensos terrenos de La Garena al oeste y poner en marcha el planeamiento y la urbanización del sector residencial Espartales Norte que constituye el límite del suelo urbanizable del Plan General de 1991.
La revisión del Plan General previsto para el comienzo del milenio se vió frustrada por la promulgación del nuevo cuerpo legislativo urbanístico de la Comunidad de Madrid y sus sucesivas modificaciones y por la tramitación compleja de las áreas protegidas de nivel europeo, ZEPA y LIC, que afectan a toda el área norte del término municipal desde el propio límite de la clasificación del suelo residencial del Plan General y a las áreas de ribera del río Henares.
Al mismo tiempo el “boom” inmobiliario residencial unido a la reconversión de antiguas industrias de la ciudad propicia modificaciones del planeamiento que afectan primero al área central de La Garena y más tarde a la antigua fábrica Gal cercana al casco histórico. Finalmente para la gran superficie de terrenos de la factoría de La Seda de Barcelona, luego Poliseda, situada en el eje norte junto al arroyo Camarmilla, se redacta un Plan Parcial de uso residencial que, a su vez, precisa de un nuevo planteamiento del encuentro de áreas residenciales e industriales en la revisión del Plan General.
El nuevo Plan General-2012, será el plan que diseñe el modelo final de Alcalá teniendo en cuenta que el desarrollo urbano ha completado todas las superficies disponibles hasta el límite de las zonas protegidas con valores naturales.
El reto del futuro será el de la reforma de las áreas industriales cercanas al casco urbano de los 70′, lo que ya prefigura el Plan en revisión, pero de forma más significada lo será la regeneración de los antiguos barrios residenciales de aquella época, una vez amortizados, para crear una ciudad contemporánea más equilibrada en relación con su valioso recinto histórico declarado Patrimonio Mundial.
En el Informe “Análisis Urbanístico de Barrios Vulnerables 1996. Catálogo de Áreas Vulnerables Españolas”. Ministerio de Fomento‐Instituto Juan de Herrera. Escuela Técnica Superior de Arquitectura, Universidad Politécnica de Madrid. ‐ HERNÁNDEZ AJA, Agustín (director), en 1991, identifica los barrios vulnerables de 1.‐ Puerta de Madrid, en 2001 son 1.‐ Puerta de Madrid y 2.‐ El Chorrillo, y en 2006, 1.‐El Chorrillo, 2.‐Reyes Católicos II, 3.‐Reyes Católicos, 4.‐Reyes Católicos/La Rinconada, 5.‐Juan de Austria, 6.‐Paseo de la Alameda, 7.‐Caballería Española, 8.‐La Estación, 9.‐El Chorrillo/Los Pinos y 10.‐San Isidro, además de
CASCO HISTÓRICO SUR, Esta parte del casco fue incorporada a la ciudad tras la ampliación del recinto amurallado por el Arzobispo Carrillo en 1454. Inicialmente se encontraba ocupada por edificaciones semirurales con corral que alojaban a población dedicada a la agricultura. Durante el siglo XX, la edificación original fue sustituida con edificaciones de vivienda colectiva de mayor altura.
BARRIO VENECIA. Se localiza al sureste del casco histórico. El barrio consta de 2 partes diferenciadas, la este, con vivienda unifamiliar obrera en una planta y manzanas alargadas de los 50′, y la oeste, con vivienda colectiva obrera de los 60′ dispuesta en bloques a 5 crujías y 7 alturas. La sección vulnerable se encuentra en la parte oeste del barrio y está formada por 4 bloques lineales.
NUEVA ALCALÁ. Barrio de promoción privada de finales de los años 70’que establece un eje de desarrollo urbano al sur del casco histórico, limitado por el río Henares. Las densidades residenciales son muy altas, a pesar de contar con abundantes espacios libres y equipamientos, debido al tipo edificatorio empleado, torres en H de gran altura. La sección censal vulnerable está compuesta por doce torres en H de 12 alturas agrupadas de 2 en 2 y unidas por sus vértices.
REYES CATÓLICOS II. El barrio está constituido en su totalidad por promociones de vivienda pública obrera construidas desde finales de los 60′ a principios de los 80′ destinadas a alojar a los trabajadores emigrados a la ciudad a raíz de su desarrollo industrial. Se localiza en el extremo oeste del núcleo urbano sobre el yacimiento de la ciudad romana de Computum. La edificación es en bloque abierto a 5 crujías y con 4 plantas sin ascensor dispuesta sobre una malla rectangular de orientación aproximada norte‐sur. Los espacios interbloque son estrechos y la densidad edificatoria alta.
REYES CATÓLICOS. Se trata de un barrio de vivienda pública construida durante la década de los 60′ para alojar a las poblaciones inmigrantes que llegaron masivamente a la ciudad tras su acelerada industrialización. El tejido que forma el barrio es muy homogéneo, con bloque abierto a 5 crujías de entre 5 y 7 alturas sobre una trama rectangular de orientación ligeramente girada respecto a la norte‐sur. La falta de planeamiento y la estrechez de los espacios interbloque hacen que la densidad residencial sea muy alta.
LA RINCONADA. Hasta finales de los 50′ se trataba de un arrabal con vivienda agrícola tradicional ligado a una de las puertas de la ciudad histórica, la Puerta de Santa Ana, y situado a su oeste que se encontraba muy poco colmatado. A partir de la industrialización del municipio fueron sustituidas las viviendas originales o comenzaron a colmatarse las manzanas con vivienda colectiva para alojar a las poblaciones obreras llegadas a la ciudad. El tipo edificatorio de la sección censal vulnerable es el bloque a 5 crujías y 5 plantas sin ascensor.
PASEO DE LA ALAMEDA. El barrio surge como arrabal del casco histórico ligado a la puerta de los Mártires, a la que debe su nombre. Originalmente se encontraba habitado por moriscos dedicados a la agricultura. A partir del siglo XIX, y sobre todo en el siglo XX, el barrio se extiende hacia el sur mediante promociones de vivienda unifamiliar y colectiva que ocupan manzanas completas. La sección censal vulnerable es una manzana de forma triangular situada al sur del arrabal original con una promoción de vivienda en bloque abierto a 2 crujías y 4 alturas promovida por la Caja de Ahorros para sus trabajadores en la década de los 60′.
LA ESTACIÓN. El origen del barrio es el arrabal de Santiago, contiguo al casco histórico por el norte y al que se accedía por la puerta de Santiago. Antes del derribo de las murallas de la ciudad histórica, que ocupaban la actual Vía Complutense, el arrabal se encontraba separado de la ciudad por la propia muralla y por el foso. A mediados del siglo XX fue uno de los tejidos de ensanche ordenados alrededor del casco para dar acogida a la población inmigrante que llevaba a la ciudad, sobre el que se construyeron colonias de vivienda social. El área en torno al paseo de la Estación sufrió hasta los años 80′ una fuerte transformación con la sustitución de las viviendas tradicionales de carácter semirural y baja altura por edificaciones de calidad alta destinadas a poblaciones de estatus medio‐alto. La sección censal vulnerable está formada por las manzanas más próximas a la estación de ferrocarril, con edificación entre medianeras en su parte oeste y una colonia de vivienda obrera de promoción pública al oeste compuesta por bloques en U, en T y lineales a dos crujías con espacios interbloque muy reducidos al continuar la trama definida por las manzanas cerradas contiguas.
EL CHORRILLO/LOS PINOS. Se trata de un barrio de vivienda destinada a trabajadores desarrollado entre los años 60′ y principios de los 80′ situado al norte de las vías de ferrocarril y al oeste de la carretera de Daganzo. La sección censal vulnerable es la parte sur y más antigua del barrio desarrollada entre finales de los 60′ y principios de los 70′ y se compone de bloque abierto a 5 crujías y 5 alturas con espacios interbloque muy reducidos.
SAN ISIDRO. El barrio se localiza al noreste del casco histórico y entre éste y las vías del ferrocarril de Madrid a Barcelona. Las 2 secciones vulnerables son de bloque abierto a 5 crujías, pero de épocas distintas y con una disposición diferenciada. La situada al norte es de finales de los 60′ con bloques lineales de 6 alturas. En la situada al sur los bloques son de 8 alturas y se disponen en U formando 2 manzanas semicerradas, fueron construidos en la década de los 70′.

Grandes desarrollos residenciales en ejecución ALCALA DE HENARES
Pero al mismo tiempo tiene Grandes desarrollos residenciales pendientes de edificar, una edificabilidad residencial prevista de 2.041.140 m2 para 18.007 viviendas y pendientes 8.392 viviendas, en sectores como ESPARTALES NORTE (690.292 m2 de suelo para una edificabilidad de 424.233 m2 de techo para 3.990 viviendas, urbanizado al 100% y pendientes de edificar 2.316), SECTOR POLIGONO 21-A (254.296 m2 de suelo para 217.346 m2 de techo para 1.508 viviendas, urbanizado al 100% y pendientes de edificar 784 viviendas), o el SECTOR UE-20 (508.223 m2 de suelo para 361.024 m2 de techo para 2.777 viviendas, urbanizado al 63% y pendientes 2.697 viviendas).
El día 28.121998 se suscribía Contrato Administrativo entre el Excmo. Sr. Alcalde-Presidente del Ayuntamiento de Alcalá de Henares y la Compañía Planificadora, S.L., la cual había resultado adjudicataria de los trabajos de revisión del vigente Plan General de Ordenación Urbana (1991) del municipio alcalaíno. Comenzaba así un proceso de revisión del cual el presente Avance 2012 representa el segundo escalón del trabajo, y que habrá de culminar con la aprobación de un nuevo instrumento de planeamiento municipal, ahora llamado Plan General, habiendo perdido el adjetivo “de Ordenación Urbana” en el nuevo contexto legal, lo que simboliza de algún modo el carácter de instrumento ordenador de la globalidad del territorio ocupado por este municipio, no sólo de la ciudad complutense. Plan General que, en este documento, recibe la denominación abreviada de PG 2013, en el entendimiento de que este podría ser el año de su redacción una vez aprobado el Avance 2012, y quizás de su aprobación, lo que habrá concedido 24 años de vigencia al PGOU aún vigente, el cual se presentó ante la Corporación municipal en 1989, y por la que recibió aprobación provisional por unanimidad de los votos de la Corporación; circunstancia ésta que ha permitido una aplicación de sus disposiciones que no ha encontrado mayor oposición a lo largo de un periodo en el que han sucedido muchas cosas, y en el que el municipio ha estado gobernado por sucesivos equipos de diferentes partidos políticos.
En la Memoria de Ordenación del Avance 2012, se dice…
…La justificación de incorporar al municipio una determinada oferta inmobiliaria residencial, a partir de la clasificación de suelo por el planeamiento, se basa en la estimación de unas necesidades futuras de vivienda acordes con la evolución de la población prevista; necesidades a las que la actividad inmobiliaria irá dando respuesta mediante la puesta en el mercado de los productos residenciales. Este caso es ilustrativo de las reflexiones iniciales sobre la vinculación causal de las alternativas temáticas, que no pueden ser desgajadas unas de otras.
La evolución futura de la demanda de viviendas depende del comportamiento previsible de tres variables básicas: la población, la ocupación media de las viviendas, y el porcentaje de viviendas vacías. Aceptando como válida la primera de las proyecciones de población realizadas, interesa centrarse ahora en la evolución esperada del número de habitantes por vivienda para los años horizonte…
Razonando con que la revisión del Plan vigente entre en vigor un nuevo instrumento (PG 2013) a finales del año 2013, la futura demanda de viviendas a la que el municipio debe hacer frente (en un horizonte de planeamiento de 2013 hasta el año 2023) podría cifrarse entre un mínimo de 8.170 viviendas (evolución más conservadora del índice de hab/viv.) y un máximo de 11.960 (supuesto más expansivo)…
y a partir de aquí, se desarrolla la tesis de un Plan General.
Uno de los temas repetitivos del escenario municipal en la España del s XXI es el qué hacer con las vías del ferrocarril. Alcalá presenta su escenario en el Avance del PG-2013:
…La ciudad está excelentemente servida por la red de cercanías de Madrid; el resto del tráfico ferroviario es de paso, pues Alcalá se ubica en un Corredor que, también desde el punto de vista ferroviario convencional de largo recorrido, es el más importante del país (al margen de las líneas de Alta Velocidad): la doble vía Madrid-Barcelona. La apertura de la línea de Alta Velocidad que une la capital del país con la catalana ha restado parte del tráfico a esta doble vía (que es cuádruple hasta Alcalá, habiendo dos destinadas al tráfico de cercanías con previsión de ser prolongadas hasta Guadalajara), pero la sección y el servicio se mantendrán (por lo que hace a sus características físicas) invariables, una vez la cuádruple vía haya alcanzado Guadalajara.
Hay, empero, dos circunstancias que conceden al ferrocarril un protagonismo decisivo en las propuestas de este Avance, derivado de los objetivos que se ha fijado el Ayuntamiento para el mismo: el soterramiento a muy largo plazo de las vías férreas a su paso por la ciudad, y el diseño de un eje que dará servicio al área de actividades económicas situada al Norte, conectando ésta con los nuevos espacios productivos (industria-terciario) que se desarrollan en Meco. Estos objetivos merecen una presentación más detallada:
Esta antigua y ambiciosa aspiración de Alcalá comienza a tomar forma gracias a los pasos dados por el Ayuntamiento y por la comunidad ciudadana: ésta ha formado una Coordinadora para el Enterramiento del Ferrocarril, lo que permite la existencia de un interlocutor con representación de estamentos diversos de la ciudad. Por su parte, el Ayuntamiento encargó los estudios iniciales de viabilidad, que habrían de servir de base para argumentar el diálogo interinstitucional que, un día, podrían hacer posible esta importante obra.
La firma INECO, resultó adjudicataria del estudio técnico titulado “Anteproyecto de Enterramiento e Integración del Ferrocarril en la Ciudad de Alcalá de Henares”. Diversas circunstancias permitieron una apropiada coordinación entre los trabajos de redacción de este Avance-2012 y los del Anteproyecto de Enterramiento, de manera que tanto aquél como éste contienen propuestas coordinadas y complementarias, cada uno en la esfera de su propio detalle…
Y hoy sigue todo igual. Bueno todo no. Cada día queda menos Alcalá de Henares que planificar. Se acaba.
La gestión de la ciudad de Alcalá de Henares ha pasado por más sombras que luces, su magna deuda supera lo creible, casos de corrupción, expedientes desaparecidos, Cofely… quizá haya que buscar el origen del mal en la gestión pública de las necesidades de vivienda, VPP que se ha hecho en la CAM durante tantos oscuros años… y las infraestructuras mal pensadas, sobredimensionadas, carísimas e ineficaces, como sus gestores. Porque da igual que los municipios estudiados estén en el «Madrid Sur» o en el «Corredor del Henares»….
Los jueces harán su tarea, y los ciudadanos reclamarán lo mejor de sus gestores para su ciudad. Seguro.
Alcalá de Henares tiene hoy una población de 198.750 habitantes, prácticamente la misma que hace 10 años), y un parque residencial de 75.344 viviendas, de las cuales 9.923 son unifamiliares (el 13,2% del total). Su parque de viviendas aún conserva 9.217 viviendas de la década de los 60′ (un 12,2%), y de los 70′ son 33.785 viviendas (el 44,8% del total), de los 80′ son 6.649 viviendas (8,8%), de los 90′ son 10.842 viviendas (el 14,4%) y de la década prodigiosa 2000-2009 son 11.586 viviendas (el 15,4%).
Cada mercado es local.
Cada municipio tiene su singularidad.
Cada municipio se retrata en su parque residencial.
…seguiremos analizando en próximas entregas los 250 municipios mayores de España